Tuesday, August 19, 2008

MEGUMI, UN FANTASMA DE 13 AÑOS

Megumi Yokota tenía trece años cuando desapareció. Su figura es un fantasma que atormentó a sus padres durante 10 años, justo cuando supieron que podría seguir viva en Corea del Norte, a donde dicen que llegó a bordo de un barco espía norcoreano tras haber sido secuestrada frente a la costa de una pequeña ciudad japonesa. Me atormenta la imagen de una niña en las bodegas de la nave, húmedas y oscuras, cruzando el mar rumbo a un país desconocido.
Megumi desapareció el 15 de noviembre de 1977 de la ciudad de Niigata, en la costa oeste nipona. La joven, en su uniforme de colegio, con camisa blanca, cargaba su raqueta de badminton y una mochila oscura, cuando se desvaneció. 

Ningún investigador pudo determinar la suerte de Megumi, hasta que otra mujer, Kim Hyon Hui, aseguró haber visto a la niña, ya mujer, en Pyongyang. Hyon Hui, nació dos años antes que Megumi, y tuvo una adolescencia plácida como hija de un diplomático norcoreano destinado a La Habana. Pero Kim Jong Il tenía otros planes para ella. Hyon Hui, una hermosa veinteañera, fue propuesta como agente encubierto. Hyon Hui recibió un completo entrenamiento con el fin de hacerse pasar por una ciudadana japonesa. El objetivo de su misión le fue revelado poco antes de acometerla: hacer estallar un avión de Korean Air con 115 personas a bordo en pleno vuelo.  Era el año 87. Megumi tenía 23 años

La trágica historia de estas dos mujeres se cruza en Pyongyang donde una joven Megumi, enseña japonés a Hyon Hui. Megumi ya se ha convertido en un fantasma, su alma atormentada le hace padecer graves depresiones. Tras diez años conviviendo con el régimen norcoreano ha cambiado su nombre por el de Eun Hae, pero no puede dejar de pensar en sus padres, en sus hermanos, en su oscura adolescencia es la fría Pyongyang, sola.

Tras las pistas aportadas por la espía, los padres de Megumi retomaron su lucha con más ímpetu. Pero las relaciones entre Corea del Norte y Japón no favorecían ningún acuerdo. Pyongyang negaba que Megumi Yokota fuera aquella profesora que mencionó la arrepentida y confesa Hyon Hui. Pero las evidencias parecían apuntar con más fuerza a que su hija fue secuestrada aquella tarde del otoño de 1977 por agentes norcoreanos, que posteriormente la embarcaron rumbo al país comunista. Al menos otros 13 ciudadanos japoneses habían sido secuestrados en fechas y modos similares.

Se dice que Megumi se casó en los 90 con Kim Yong-Nam un estudiante surcoreano que fue secuestrado también a finales de los 70, con 17 años. Según comentaría posteriormente Yong-Nam, desde el hotel cercano a la DMZ donde se organizan los encuentros entre familias de las dos Coreas, Megumi sufría graves depresiones que la llevaron al suicidio a lo pocos años de dar a luz a una hija, que hoy tiene 22 años y estudia en la Universidad Kim Il Sung de Pyongyang.

Los angustiados padres de Megumi aún seguían pidiendo ayuda al gobierno nipón cuando en 2002 se organizó una historica visita que reunió a los jefes de Estado de Japón y Corea del Norte en Pyongyang. Uno de los temas principales de la agenda entre Kim Jon Il y Koizumi era la liberación de los japoneses secuestrados. Finalmente, Pyongyang reconoció haber tenido bajo custodia a 13 ciudadanos nipones desaparecidos en Japón en la década de los 70. En la lista aparecía Megumi Yokota; la siguiente anotación tras su nombre era: fallecida en 1993 (posteriormente las autoridades norcoreanas dijeron que murió en la primavera de 1994). La familia Yokota recibió entonces un nuevo cúmulo de sorpresas. Tras el viaje le fueron entregadas pertencias de Megumi entre ellas tres fotos : en una aparecía de Megumi al poco de llegar a Corea del Norte.  Poco después llegaron sus cenizas que, tras pasar un inconcluyente análisis de ADN, no despejaron las dudas sobre su suerte. Su fantasma aún es un recuerdo que vaga un poco más al norte de donde me encuentro.

La mujer que dio las primeras pistas sobre el destino de Megumi, Kim Hyon Hui, ahora es libre. Dicen que sus principios y su fe en el comunismo se requebrajaron al salir de la sala de interrogatorios. Sus custodios la llevaron a conocer a Seúl y
desde la ventana del coche patrullla vio las luces de esta ciudad, el barullo de gentes y descubrió que la propaganda del Norte la había llevado a arriesgar su vida inútilmente.  Fue entonces cuando lo confesó todo, incluido el paradero de Megumi. Hyon Hui estaba viva de milagro después del complot que montó con otro agente secreto (un coreano de 70 años) para colocar una bomba camuflada en aquel vuelo de Korean Air que desapareció de los radares sobre el mar de Andamán. Ambos fueron capturados en Bahrein después de dejar el explosivo y desembarcar con pasaportes japoneses. Como habían sido entrenados, tomaron sendas dosis de cianuro para no dejarse interrogar, pero Hyon Hui sobrevivió.

En 1989 Hyon Hui fue condenada a muerte aunque con la llegada de la democracia a Corea fue perdonada.  Se sabe que se casó en 1997 y que vive bajo otro nombre y con protección por miedo a las represalias. Creó una familia al sur de Corea, en Gyonju, donde regentaba un restaurante japonés. Se rumorea que ahora reside en Seúl y que debido a sus remordimientos no ha conseguido vivir tranquila y que por ello se divorció.

Ambas mujeres son protagonistas de esta guerra irracional que aún da coletazos en esta zona del norte de Asia. Ambas se han convertido en fantasmas que todavía se mueven entre nosotros y que vienen y van, mientras la gente se pregunta, al igual que ellas, ¿cómo llegamos a esto?

1 comment:

Anonymous said...

Hola, soy Otzumi... y llego a esta pagina debido a esos vagabundeos conque a veces me doy el lujo de disfrutar... y me sorprendo de lo que el ser humano (como genero) a veces es capaz de lograr... en este caso llevar al extremo dos vidas como las de estas dos mujeres-niñas que fueron secuestradas de un futuro propio y se que desde aqui lo unico que puedo hacer es regresar a mi corazon y desde ahi enviar a donde quieran que esten un poco de luz... Un saludo y gracias por lo escrito, es conocimiento, gracias una vez mas